Me
molesta demasiado no importarte, tanto como darme cuenta de que nunca te importé.
Ni hoy, ni ayer, ni mañana lo haré.
Me
odio por dentro y por fuera. A mí, no a vos.
Se
sabía que eras así, nada me sorprende demasiado, YO ya lo sabia. Decidí
ignorarlo. Decidí quererte.
Que
estúpido pensar que podías llegar a cambiar.
Dulce y a la vez amargas palabras escribes. Muy linda entrada y no te odies, al final del camino siempre hay alguien mejor.
ResponderEliminar